martes, 3 de julio de 2012

#8

MESES DESPUÉS...


- Cuanto dices que me ofreces?
+ 10000 €
- Es una cantidad interesante, pero no acepto.
+ Promocionaremos tu arte, no me digas que no te atrae la idea.
- Hace tiempo que no creo en "mi arte".
+ Yo no deje de creer en el, me podrías llamar admirador.
- Muy bien, pues yo le digo a mi admirador que me deje en paz, y que se meta sus euros donde le quepan.
+ 15000, no me digas que no te atrae.
- Yo no me vendo, ni por mas, ni por menos, directamente, yo no me vendo, ¿entendido? -dije con tono soberbio.
+ No me digas que no es tentador...
- Yo no creo en la tentación.
+ ¡Pero tu crees en algo? ¡Por Dios! Deja esos "principios" tuyos y acepta! Tienes una edad para saber lo que te conviene!
- No.
+ 30000 de apertura, después te daremos más, y más y más...
- Y en que consiste este proyecto si se puedo saber?
+ Ya empezamos a entendernos!
- Estás tardando.
+ Este proyecto es muy simple. Queremos anunciarte a todo el País como un gran artista, un gran tatuador, una persona sensible y demás cualidades tuyas (...). A través del medio televisivo. Te haremos famoso.
- Adiós.
+ Pero...
- A-di-ós.
Al llegar a casa vuelvo a rememorar mi viejo álbum de tatuajes, y veo la gran cantidad de trabajos echos como empleado, y la mínima cantidad como propietario, lo echo todo de menos, ya ni me acuerdo como pasaron las cosas, ya no me acuerdo ni como llegué a vender mi tienda, que ahora está convertida en una pequeña tienda de electrodoméstico. Solo me queda la hipoteca,y nada de dinero para pagarla,  pilas y pilas de periódicos, todos amontonados, sin leer, todos comprados por mi preciosa madre. Cojo un periódico, y tras 20 minutos de fútbol, P.I.B., sanidad, educación, etc., leo un pequeño artículo apartado, titulado, "ANOREXIA: 80.000 CASOS NUEVOS Y 100 MUERTES AL AÑO", Después de leer el contenido de la noticia, observo detenidamente la foto de una joven modelo mostrando su cuerpo demacrado sin miedo, imitando a Isabelle Caro, con una costilla tatuada, en el lugar de su costilla correspondiente, era ella, expuesta como un ejemplo de las 100 muertes anuales. En medio de la noticia había una frase suya, "No dejemos que nos desgasten y maltraten palabras que no conocemos". Era imposible no llorar, era imposible no recordar mi tienda, y todo lo que se fue, y ya no va a volver jamás. No se si debo aceptar, no tengo a donde ir, ni que hacer en la vida, no tengo planes de futuro, ni recursos para empezar de cero, pero aún me quedan principios, puede que sean una absurda idiotez, pero siempre les voy a ser fiel.
Suena la radio "¿When will I see you again? You left with no goodbye, not a single was word said..." Adoro esa canción, todo me identifica con todo para crear unas obras que acaban muriendo, como Sandra. Su batalla está perdida, siempre nos quedará una guerra, en la que cada vez hay más y más participantes, contra un solo objetivo, superar esas críticas sociales, que solo sirven para arruinar vidas humanas.
 Ojos que  no lloran, lágrimas que caen, repetía una y otra vez mi mente, ya no sabía por que lloraba, debía ser una acumulación de todo, no quiero echar para adelante.
Suena el teléfono,
- ¿Amiga?
+ ¿Que te pasa?
- Nada.
+ Voy a tu casa. Ahora.
- En serio, no...
+ No intentes hacer que no me importes.
Colgué el teléfono.
En la pared de mi salón hay colgado un mapamundi, me gusta clavar chinchetas en cualquier lugar del mapa, y imaginarme que hay en el mismo punto donde clavé la fina chincheta, que a escala es enorme, pues lo pequeño es enorme. ¿Quien estará llorando en el pequeño Japón?, ¿Y en Canadá? Llorarán por lo mismo que yo?, ¿Nos separan las enormes diferencias de cultura en estos casos?, la verdad, no lo se, no soy Dios, mas bien, no se nada.
En mi cocina hay loza acumulada para lavar, el cesto de la ropa sucia está hasta arriba, y aún tengo que limpiar toda la casa, esto antes no me pasaba.
Enciendo mi inusual pipa, en la que saboreo el tabaco más barato, echo una calada al aire, que se desvanece como toda la felicidad que tenía.
Pero que hago, lamentándome, soy un idiota, eso es lo que soy, aquel cliente... su familia me debe de odiar, todo el mundo me odia, soy un desgraciado, no tengo donde caerme muerto, cosa que el por lo menos si tubo. En el suelo de mi tienda, por mi culpa.
+ Pero que haces!? Ahí tirado en el suelo, fumando tu pipa, hay mucho mundo fuera, que tu no ves, por la tontería que tienes encima... -dijo mi amiga-
- Tu no sabes lo que se siente, siempre tuviste todo muy fácil.
+ Te recuerdo todo lo que te conté en nuestro reencuentro? Y creo que lo mio era peor, y seguí para delante.
- No todos tenemos la misma personalidad. -dije secamente-.
+ Tu siempre mostraste una personalidad firme, ¿Por qué te rindes ahora?
- No me rindo, admito lo que soy.
+ Eres tonto? Hablas cosas que no tienen sentido, y lo haces muchísimo, estoy harta de que estés todo el día ahí tirado sin hacer nada, ¡Mira como tienes tu casa!, no puedes seguir así, ahora mismo te das una ducha, te vistes y vienes conmigo a una entrevista de trabajo, en el bar donde trabajo necesitan otro camarero, es un trabajo duro, pero es lo que toca.
- No quiero ir, yo no soy camarero.
+ ¡Entonces que eres?
- No soy nada.
+ Eres tatuador, y ahora no vas a poder trabajar de eso, pero ya encontrarás una salida. De momento esto puede ser una muy buena opción.
- Yo lo que soy es un monstruo, por mi culpa el está muerto.
+ No, tu no fuiste un monstruo al dejar que ese hombre muriera, fuiste un monstruo al volver de la cárcel, no eras tú, y ahora no se puede decir mucho que seas tu realmente.
- Y si el no quería morir...
+ El quería morir, estoy segura. Mi amigo no dejaría morir a alguien que no quiere morir.
- Soy humano, y puedo malinterpretar gestos.
+ Eres humano, y estoy segura de que tu gran humanidad hizo que ese hombre dejara morir.
- ¿Y su historia?...
+ Déjate de historias, ya no puedes volver atrás. Date una ducha, y ve a por la entrevista.
- No quiero... ya podría tener un trabajo como Dios manda si quisiera, pero no quiero...
+ De verdad, no te entiendo. Espero que un psicólogo sea capaz de hacerlo.
- Yo lo que necesito es desaparecer...
+ ¡No! Tú lo que necesitas es tatuar, que es lo que te hace feliz. Es trabajo es de tatuador, ¿verdad?
- Algo parecido...
+ ¿Entonces? ¿A que esperas? ¡Acéptalo!
- Aún me quedan principios, y no quiero volver a tatuar.
+ Tu eres tatuador, y tatuar siempre fue una de tus normas.
- Beethoven decía que hay que conocer las normas a la perfección para poder romperlas.
+ Pero eso lo decía otra persona, tú no, tu crees en lo que piensas...
- A veces pensar es demasiado malo.

DATOS:

Isaballe Caro era una modelo y actriz francesa, sufría anorexia nerviosa desde los 13 años. Antes de morir [9/9/1982 - 17/11/2010 (a los 28 años) ], realizó una campaña contra la anorexia, donde mostraba su cuerpo desnudo para mostrar al mundo los peligros de la anorexia y la bulimia.
 Los siguientes enlaces corresponden a las imágenes de su campaña:


http://www.cadena3.com/admin/playerswf/fotos/ARCHI_105404.jpg


http://media.tratamientosbelleza.com.ar/wp-content/uploads/2010/12/isabelle-caro-NOLITA.jpg


2 comentarios:

  1. Es un texto muy duro peor pro desgracia ocurren estas cosas

    ResponderEliminar
  2. Muchas gracias por tu opinión, seguiré informándome sobre temas actuales para después poder hablar un poco de ellos, gracias. :)

    Twitter: @TattoosRemember

    ResponderEliminar